Sentirse Bien-Sentirse Mal


Sentirse Bien-Sentirse Mal

El juego de “Sentirse Bien-Sentirse Mal “es una técnica que, originalmente, se elaboró para ser utilizada con niños adoptivos con problemas y que viven en ambientes de adopción con problemas y que viven en ambientes de adopción - atención. Esta técnica se utiliza con cualquier diada de figura paterna-e-hijo, para lo cual se considera el apego y la comunicación afectiva como objetivos terapéuticos.

Esta técnica implica un componente de conversación, uno diádico de juego y otro más de juego libre. Se emplea como un accesorio de la terapia de juego individual, la terapia familiar, el tratamiento diurno y otros semejantes: pero también se le puede utilizar de modo aislado.

Apego

Según Bowlby (1988), lo define como una base segura, un vínculo saludable entre padre e hijo. Se identifican dos variables paternas:
a)  La responsabilidad a las señales del hijo en cuanto a sus sentimientos y necesidades.
b) Interacciones sociales disfrutables de manera mutua.




“Sociedad con objetivos corregidos”, el niño desarrolla capacidades y lingüística más complejas, es capaz de adquirir insight.




El hijo y el padre son capaces de compartir objetivos comunes y experimentar una sensación de propósito común. Los hijos con problemas en sus relaciones de apego tienden a tener dificultad para relacionarse con los demás, en la regulación de sus estados emocionales y su conducta, so como en la comunicación de sus sentimientos.


COMUNICACIÒN AFECTIVA

La coordinación en el sistema de comunicación  afectivas determinante para el desarrollo de la capacidad del niño e interactuar los demás, regular sus estados emocionales y comunicarse de manera afectiva.

Se identifican tres sub habilidades para  el desarrollo de esta capacidad.
a. Conciencia de la variedad de estados afectivos.
b. Capacidad de relacionar esos sentimientos con situaciones de la propia vida.
c. Verbalización de los sentimientos de manera que resultan apropiadas.

El juego de “Sentirse Bien-Mal” proporciona una estructura  que facilita tanto la comunicación afectiva como la relación de apego entre una figura paterna y su hijo.  Los objetivos de este juego incluye lo siguiente:

1. El hijo aprenderá a identificar los estados afectivos positivos, así como los negativos.
2. El hijo relaciona tales sentimientos con situaciones de su propia vida, tanto pasadas como presentes.
3. La figura paterna aprenderá a responder a los sentimientos negativos de una manera sensible y apoyadora, de modo tal que la experiencia del hijo respecto a un sentimiento negativo, se transforma en otra de recibir comprensión y aceptación.
4. La figura paterna y el hijo aprenderán a utilizar una estrategia para la solución de problemas.
5. La figura paterna y el hijo aprenderán a participar en interacciones sociales disfrutables de manera mutua.
6. Dentro de la seguridad de apego con la figura paterna y con el desarrollo de habilidades de comunicación afectiva, el hijo será capaz de encauzar y translaborar traumas y conflictos del pasado.

El juego de “Sentirse Bien-Sentirse Mal” consiste en tres componentes:

1. Conversación
2. Juego diádico
3. Juego Libre



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